martes, 14 de febrero de 2017

Galería de candidatos al trono de España


Leopolde de Hohenzollern-Sigmaringen


El duque de Montpensier




Amadeo de Saboya




Fernando de Coburgo


Baldomero Espartero

Un rey para España

Encontrar un rey se convirtió en un grave problema interno –las fuerzas políticas que habían derribado a Isabel II no se ponían de acuerdo en quién debería sustituirla: el duque de Montpensier, los unionistas; Fernando de Sajonia-Coburgo, los progresistas-13 y también internacional, pues se desataron las rivalidades entre las principales potencias europeas (todas ellas monarquías) para "colocar" a "su" candidato en el trono vacante de la Corona de España.
El portugués Fernando de Sajonia-Coburgo-Gotha rechazó el ofrecimiento. La candidatura de Antonio de Orleans, duque de Montpensier, esposo de la hermana de la reina Luisa Fernanda de Borbón, no prosperó al matar en un duelo al infante Enrique de Borbón, hermano del esposo de Isabel II. El alemán Leopoldo de Hohenzollern Sigmaringen (al que los españoles llamaban en tono de humor, y ante la dificultad de pronunciar correctamente su apellido: «Olé, olé, si me eligen»), contaba con el valioso apoyo del canciller Otto von Bismarck. Sin embargo, Napoleón III lo vetó temiendo que Francia quedara entre dos monarquías Hohenzollern. En medio de este enfrentamiento se presentó elTelegrama de Ems que desató la Guerra Franco-prusiana de 1870. El futuro Alfonso XII no fue aceptado por Prim debido al nefasto recuerdo del reinado del último Borbón, su madre Isabel II.
Así pues, tras quedar descartado el príncipe prusiano Leopoldo de Hohenzollern-Sigmaringen, por la oposición de Napoleón III y el duque de Montpensier, a cuya candidatura también se oponía Napoleón III a causa del antagonismo entre las casas dinásticas francesas —los Bonaparte y los Orleans—, además de que el entronque familiar de Montpensier con los Borbones al ser cuñado de la destronada Isabel II hizo que esta opción fuera muy poco apoyada por los partidos monárquicos-democráticos españoles, "sólo quedaba la candidatura italiana de la casa de Saboya, impulsada por Prim desde el verano de 1870 hasta convertirse en su principal valedor".

El 16 de noviembre de 1870 las Cortes Constituyentes eligieron a Amadeo de Saboya, duque de Aosta y segundo hijo del rey de Italia Víctor Manuel II, como nuevo rey de España, con el nombre de Amadeo I. Votaron a favor 191 diputados, en contra 100 y hubo 19 abstenciones —60 votaron por la república federal, 27 por el duque de Montpensier, y 8 por el general Espartero—. “La solución no satisfacía más que a los progresistas y fue aceptada con enorme frialdad por la opinión pública española, que no llegó a sentir nunca el menor entusiasmo por el príncipe italiano”.